Tal como se intuía el Gobierno al parecer decidió “sin anuncio oficial” la muerte del cupo electrónico de divisas, antes conocido como Cadivi y que luego fue bautizado como CENCOEX, y que representaba, luego de muchos recortes, apenas $300 anuales para todo venezolano con tarjeta de crédito y cuya solicitud había sido aprobada.
Desde comienzos de este año se presentaron anormalidades con el cupo electrónico. La primera irregularidad es que no había una fecha definida para su activación automática y los venezolanos esperaban en ascuas la autorización para su uso porque había fuertes rumores de una devaluación.
Se mantenía el suspenso en torno a cual cotización se asignaría el cupo electrónico ya que se hablaba de su cobro a la tasa Sicad, que en aquel entonces estaba por encima de los Bs. 50 por dólar, ya que el Simadi no existía para enero 2015, porque entró en vigencia meses después.
Finalmente se activó el cupo electrónico a finales de enero, aunque de manera muy irregular y hasta selectiva por cuanto no todos los bancos cumplieron con la activación.
Luego el 10 de abril el Gobierno lanza la Providencia 011, el llamado #Cadivazo, que mocha el cupo viajero y en un primer momento fracciona el electrónico a 100 dólares trimestrales, pero luego el ejecutivo corrige la decisión y autoriza su uso completo en una sola ocasión.
El otro problema que ha sacudido al cupo electrónico, es que a partir de la publicación de la Providencia 011, desde el portal del CENCOEX no se puede hacer una solicitud nueva para el mismo. O sea que nadie que no haya tenido el cupo podía hacer su solicitud por primera vez.
En un primer momento se anunció que la suspensión de nuevas solicitudes era temporal, pero aún permanece ese acceso restringido. No hay nuevos cupos electrónicos y solo se están aplicando a medias los existentes y no todos los beneficiarios han podido completar su operación.
Fuentes bancarias confirmaron a Área Privada de Verdades y Rumores, que todo indica que el cupo electrónico desapareció finalmente, aunque el Gobierno no ha hecho el anuncio formal. Ni siquiera se estima que año próximo serán activados los ya existentes y que estén en la banca pública.
También se maneja la posibilidad de aplicar un nuevo recorte al cupo viajero para finales de este año o comienzos de 2016, por cuanto el Gobierno no tiene dinero para cumplir con esos compromisos que no pueden esperar y obligatoriamente son de rápida liquidación a los bancos.
El 2016 será un año mucho peor que el actual en materia de ingresos en divisas para el país, por lo que el Gobierno tendrá que ajustar aún más sus gastos. Ya este año con las limitaciones impuestas por la Providencia 011, los expertos estimaban que había un “ahorro” de unos $3.200 millones.
Aunque aún no hay nada oficial, informalmente los venezolanos deberíamos despedirnos del cupo electrónico y si somos sinceros del viajero también, porque si hay un nuevo recorte no vale la pena usarlo por los bajos montos que serían aprobados.
Darwin Chávez|@VerdadesyRumores
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