El presidente de Venezuela Nicolás Maduro ha aprovechado la agresión realizada por la orden ejecutiva de Obama, que establece sanciones contra Venezuela para concederse a sí mismo aún más poderes, a través de una la aprobación de una ley “anti-imperialista”.
“Los Estados Unidos de Norteamérica y el presidente Barack Obama, representando a la elite imperialista de Estados Unidos, ha decidido pasar personalmente a cumplir la tarea de derrocar a mi gobierno, intervenir Venezuela, a controlarla”
“Promulgaré una ley especial que me da poderes especiales para preservar la paz, la integridad y la soberanía del país ante cualquier situación que se presente debido a esta agresión imperialista”
Recordemos que Obama emitió ayer una agresiva orden ejecutiva en la que declara la situación en Venezuela como una “amenaza inusual y extraordinaria a la seguridad nacional y política exterior de Estados Unidos”.
La declaración de una “emergencia nacional” es una herramienta con la que cuenta el presidente estadounidense para aplicar sanciones contra un país en determinadas circunstancias y que le permite ir más allá de lo aprobado por el Congreso.
La acción ejecutiva de Obama ordena la suspensión de visas y la congelación de bienes en territorio estadounidense de siete funcionarios militares y policiales venezolanos.
Sea como sea, parece que ambos gobernantes se complementan a la perfección y las últimas decisiones de Obama demuestran también la intención de EEUU de intervenir ya de forma activa y directa en la política latinoamericana.
Quizás el creciente conflicto con Rusia y China amenace con extenderse pronto a América Latina…
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