sábado, 30 de mayo de 2015

Crisis de identidad como sociedad

Lo vemos en las calles, en el día a día, en nuestro país, en latino américa y en muchas partes del mundo existe un problema de identidad. Reza un dicho que los que no aprenden de su pasado están condenados a repetirlo, y esto es patente en la sociedad actual.
Creo que para comprender mejor el concepto de identidad podríamos mirar el siguiente ejemplo:
la identidad es el conjunto de los rasgos propios de un individuo o de una comunidad. Estos rasgos caracterizan al sujeto o a la colectividad frente a los demás. Por ejemplo: “El mate forma parte de la identidad rioplatense”“Una persona tiene derecho a conocer su pasado para defender su identidad”.


Ya en parte del siglo 19 habíamos pasado por penurias y miserias, crisis y suplicios, y hoy, al pasar ya 2 siglos, seguimos en el mismo abismo, sondeando en vacío infinito, sin entender que nos ha traído a este punto y que puede violar las leyes de la física (y de este sistema de control) para general el milagro o el esfuerzo de volar y salir incólumes.
La verdad, es que como sociedad, como humanidad somos una retahíla de valores añadidos por otros, y en Venezuela esto es patente como un buen ejemplo. En el siglo 19 como parte de la gesta independentista buscamos los valores Europeos, Españoles por ser colonias en aquel tiempo, Franceses después por eso de “viva la revolución, viva la libertad”, siendo a finales del siglo 19 este país un país afrancesado, si la palabra lo permite. De esta experiencia creo que lo que más nos queda como ejemplo es la palabra corotos,
Según Angel Rosenblat (Estudios sobre el habla de Venezuela. Buenas y malas palabras. Monte Avila Editores. Caracas, 1984) la versión etimológica de esta palabra tienen sus orígenes en la siguiente historia:
“Sobre el origen de coroto hay una hermosa anécdota. Se dice que Guzmán Blanco trajo de París un lienzo de Corot, el famoso paisajista. El general solía recomendar machaconamente al servicio: ¡Cuidado con el Corot!. Las criadas empezaron a burlarse del ‘coroto’ del general, y la expresión se extendió a objetos más diversos.
Después con la fiebre del oro negro, tomamos los valores Estadounidenses, y en general del mundo occidental, después llegaron los valores de las naciones circundantes, por los desplazados de la violencia y la pobreza que se sufría en los países vecinos en los tiempos de la gran bonanza de los 60s y 70s hasta la llegada de la mal llamada revolución, donde tomamos los peores valores que hubiéramos querido como sociedad.
Esto anteriormente escrito puede parecer somero y superficial, pero quiero dar a entender con esto un punto importante: como pueblo, como nación no tenemos una IDENTIDAD clara y definida, pues siempre seguimos la ola de la moda del momento, siempre buscando valores que no son nuestros,
Como sociedad, hemos perdido los valores que nos aglutinan como estado, porque si, el estado lo hacemos nosotros, pues Kumar el alma de este planeta no tiene fronteras, las fronteras son algo psicológico, límites en la psique los diferentes colectivos humanos, que no comprenden ni se preguntan el porqué de esta situación.
Creo que solo los pueblos y sociedades con fuertes valores y/o una fuerte identidad pueden sobrevivir, fructificar y multiplicarse, en el paso del tiempo.
Pueblos como el Hebreo, que ya cuentan con miles de años como identidad, con una religión definida, que han sido llevado como esclavos, que han ido del allá para acá y todavía a estas fechas, reconocen su identidad, sus valores, defendiendo lo que son a capa y espada. También están los árabes musulmanes o no  y los pueblos del Medio Oriente, que  tienen una fuerte identidad que es evidente que va a evolucionar pero para crecer y prosperar, pues la ola de violencia en algún momento más pronto que tarde desaparecerá y las divisiones actuales con ella.
Tenemos a los chinos, que como identidad cultural han sobrevivido por más de 3.000 años, desde los antiguos reinos, hasta el imperio HAN y los sucedáneos que han extendido por aquellas tierras.
También tenemos a los rusos, mucho más actuales pero no menos valederos. Estos han pasado por guerras, exterminios, y como identidad cultural se han reafirmado actualmente
También otro ejemplo valedero son los estadounidenses, mal llamados en cierta medida americanos, pues ellos no son toda américa, aunque esto tiene una cierta estrategia. La cultura norteamericana aunque de relativa nueva data de entra las identidades del mundo ha sido una de las más exitosas en la actualidad para extender sus valores sociales y culturales con lo del sueño americano, aunque en cierta medida es una sociedad frágil y que considero a largo plazo está destinada a desaparecer, pues no tiene la cohesión de los primeros ejemplos. Las razones, es que su moldeo se basa en lo material, en lo económico, y toda unión basado en algo perecedero está condenada a desaparecer. Los chinos tiene una historia común, largas tradiciones y mucha historia sin hablar de religión, los Rusos son mucho más antiguo de lo que se cree, y se han sembrado una fuerte identidad, incluso a nivel religioso y espiritual, Los Hebreos y árabes, bueno eso está de más decir, pues siguen sus leyes.
Podría enumeras muchos más pueblos con una cultura e identidad que ha sobrevivido los albores del tiempo, pero creo que con los anteriores es suficiente para darnos una idea.
Evidentemente Los pueblos exitosos a corto o largo plazo, son los que se unen con un fin común, los que defienden lo que son, los que se apoyan, los que buscan un patrón común que los haga creer que son un pueblo, que tienen los mismos intereses y que van en el mismo camino (aunque tengan grandes desigualdades).
El problema que ocurre con Venezuela y otras sociedades de la periferia, es que no tenemos una identidad fuerte, pues siempre nos vemos influenciados por el poder imperante en el momento. De verdad de seguir como vamos no veo a Venezuela como estado dentro de 50 años, y lo que es peor, no nos veo como pueblo, pues las retahílas son cada vez más pequeñas, y hemos perdido las que nos podrían ayudar a fructificar. En este punto lo que ha ocurrido es que se ha perdido la identidad en tal grado, que esto nos ha llevado a una crisis de valores y de híper materialismo, en una sociedad donde importa y disculpen las malas palabras, más unas tetas y un culo hecho, que lo que representas como individuo a nivel de conocimientos, experiencias y VALORES!!!. Ya nos importa poco o nada la venezolanidad, hemos perdido el respeto, las leyes, el honor, el amor propio, la fuerza de lucha y el respeto por nuestros hermanos, además de vivir una gran apatía y dejadez que permite que unos pillos roben mientras esperamos que otros hagan el sacrificio. De paso tomamos valores de sociedades que por su Híper Materialismo se encuentran en momentos de crisis, llevándonos a nosotros a una consecuente crisis de valores, que en este momento está por llevarnos al exterminio como sociedad. Lo peor, es que la gente, las masas aborregadas no lo quieren ver, pues en su supina idiotez no se miran más allá de los zapatos y esto no es solo en las clases populares, creo que incluso se hace más patentes en aquellas clases acomodadas o adineradas, pues sus valores son incluso alejados de la integración, pues se aíslan de los demás por creerse mejores, y esto nos ha llevado hasta la crisis social y gubernamental denominada chavismo que no es más que una consecuencia de esa sordera de aquellos mantuanos que en su soberbia creyeron que tenían a dios agarrado por la chiva y ahora ven desaparecer su poder para dárselos a otros nuevos ricos que eventualmente también se extinguirán y darán paso a nuevos burgueses, sean de izquierda, centro o derecha. Como decía Alí Primera en una de sus canciones “La ignorancia no mata al pueblo pero tampoco lo salva” y esto es la cruda realidad.
Sinceramente No tenemos la identidad cultural, social y religiosa de los Hebreos, Chinos, árabes, rusos, Hindúes (esta uns sociedad de castas muy desigual) y todas las sociedades que buenas o malas han trascendido los albores de los tiempos, pues estos han aprendido a ser ellos mismos, y aunque existen las desigualdades anteriormente descritas, más o menos bien luchan como uno a la hora de pelear y no ser absorbidos por otras culturas.
No es que quiera ser como aquellos, pero sé que si tomamos conciencia, podemos encontrar nuestro camino, aquel que nos llevará a mantener, crecer y sobrevivir como identidad cultural particular. La cuestión es que si todos no tomamos la decisión de unirnos, nunca podremos alcanzar este nivel y por ende desapareceremos de los albores de la historia, para ser menos que leyendas si es que algo de eso queda.
Al mirar en la calle actualmente solo veo vacío, miseria, dolor, desesperación, impotencia, soberbia, odio, y mucha pero mucha idiotez, pues los pobres esperan un mesías que les siga manteniendo y los ricos una nueva ola de bonanza que les siga manteniendo su estatus. En vez de buscar una retahíla de identidades foráneas debemos crear reglas de convivencia, nuevas formas de vivir, y nuevas formas de crecer, debemos dejar de lado la cohesión por el materialismo y buscar valores espirituales y culturales comunes, además claro de ponernos a trabajar y dejar de esperar la mano extendida para que el estado nos mantenga.
Es difícil saber que depara el futuro, pues hay muchas líneas de tiempo, muchos finales posibles, pero sé que yo, como individualidad, siempre buscaré mantener mis valores, como humanos, como hermano de todos los pueblos y como venezolano para buscar un mejor porvenir. Si el creador me da la dicha de dejar descendencia, entonces buscaré sembrar en mis descendientes los mismos valores de amor y respeto, tanto por ellos mismos como por los demás, y buscare que estos sean la semilla de cimentar nuestra identidad, para que algún día en un futuro lejano, nos veamos como hermanos de una misma humanidad, Así como de un conglomerado dentro de esta que se llame venezolano.
La identidad de gana luchando por ella, no esperando que caiga del cielo. ¿Tendremos el valor de sembrarla? Eso solo está en cada uno de nosotros.


Eleyzam 

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