La hiena mayor: hacia el aborto obligado en todo el orbe.
(Transcrito de Infovaticana)
La candidata a la presidencia de Estados Unidos defiende sin escrúpulos el infanticidio prenatal.
Clinton ha lanzado esta propuesta ante la pregunta que le han hecho sobre Helms Amendment, la ley que prohíbe entregar fondos de ayuda a países extranjeros para financiar el rendimiento del aborto o motivar a los médicos a practicar estos asesinatos.
La demócrata ha defendido que todos los abortos alrededor del mundo deberían ser financiados por EEUU, aunque no ha dicho expresamente que se debería derogar esta ley.
También ha insistido en que los americanos tienen la responsabilidad de ayudar a las mujeres de otros países que desean abortar, y si no es de manera directa, se deben buscar personas que les proporcionen las facilidades para poder hacerlo.
Durante la rueda de prensa, un periodista le ha preguntado su opinión acerca de las mujeres que se quedan embarazadas tras ser violadas por miembros del Estado Islámico; “Creo que deberíamos poner nuestra mirada sobre estas zonas de conflicto, y si el gobierno de Estados Unidos nos lo prohíbe, tendremos que trabajar con organizaciones sin ánimo de lucro para atender a estas mujeres que necesitan ayuda”.
La candidata a la presidencia también ha explicado que defiende el aborto porque ” lo mejor es dejar esta complicada decisión a la mujer, su familia y su médico”.
La activista y provida Rebecca Kiessling, que fue concebida tras una violación, ha expresado su oposición a lo propuesto por Hillary Clinton. Asegura que “las víctimas de las violaciones son las que necesitan verdadera ayuda, no el aborto”.
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